Acerca de Online French Teacher
Online French Teacher es una plataforma en línea para aprender francés como lengua extranjera. Es un proyecto dirigido por Anthony Lucas desde 2022. Por el momento, Anthony es el único profesor. Sin embargo, Online French Teacher tiene la ambición de convertirse en una escuela de francés como lengua extranjera en línea, reuniendo a varios profesores que trabajan en la misma dirección: el desarrollo de herramientas en línea para apoyar el aprendizaje del francés.
Online French Teacher es un proyecto maduro, basado en la experiencia de anteriores escuelas de francés como lengua extranjera en Hong Kong y México desde 2007.
Misión
Desarrollar las condiciones óptimas para el aprendizaje del francés como lengua extranjera (FLE) en línea para adolescentes y adultos
Me encanta enseñar francés a adolescentes y adultos, y es natural que mis esfuerzos se dirijan a desarrollar medios para que este público progrese de la manera más eficaz posible.
Crecí viendo cómo los ordenadores y las nuevas tecnologías cobraban cada vez más importancia en nuestra vida cotidiana. He visto cómo a lo largo de los años Internet se ha hecho indispensable, con algunos lados malos, por supuesto, pero también con un enorme potencial de acceso a la información y, por tanto, a la educación. Las personas que quieren aprender francés como lengua extranjera encuentran hoy en día muchas aplicaciones y sitios web donde practicar y progresar. También es posible conocer a profesores en línea.
Sin embargo, me parece que se puede hacer mucho más, con el objetivo evidente de dar a los alumnos lo que necesitan para aprender rápido y bien.
Visión
Convertirse en la plataforma número 1 para el aprendizaje y la enseñanza en línea del francés como lengua extranjera
Sí, lo sé, estoy pensando a lo grande 🙂 No me falta ambición y soy consciente de que para alcanzar este objetivo será necesario mucho esfuerzo, durante muchos años. Pero no te preocupes. Estoy entusiasmado y mi hoja de ruta está bien trazada.
Hablo de convertirme en una referencia en el aprendizaje Y la enseñanza del francés porque veo que no sólo hay mucho que se puede hacer para que los alumnos aprendan mejor, sino que también hay mucho que avanzar para que los profesores puedan prosperar y disfrutar enseñando francés en línea.
Mi visión es, por tanto, la de un encuentro armonioso para compartir la lengua y la cultura francesas en línea, que satisfaga las necesidades tanto de quienes imparten conocimientos como de quienes los reciben.
Valores
Amabilidad
La amabilidad es una fuerza poderosa que puede transformar el aprendizaje del francés en una experiencia maravillosa y gratificante. Crea un ambiente cálido y enriquecedor en el que los alumnos se sienten apoyados y animados a superarse.
Al ser amables, los profesores envían un mensaje claro: “Eres importante, se te valora y se te permite cometer errores“. ¡Qué alivio es eliminar el miedo a equivocarse! Esta indulgencia permite a los alumnos asumir riesgos, explorar nuevas destrezas lingüísticas y expresarse sin inhibiciones.
La amabilidad también crea un fuerte vínculo entre profesores y alumnos. Fomenta un sentimiento de confianza y respeto mutuo que facilita la comunicación. Cuando el profesor es comprensivo, los alumnos no sólo no temen equivocarse, sino que no se avergüenzan de no entender. Se sienten libres para “levantar la mano” y pedir ayuda. Los profesores atentos escuchan las necesidades individuales de los alumnos y se adaptan a su ritmo de aprendizaje, ofreciéndoles así un apoyo personalizado.
Perseverancia
La perseverancia es una virtud inestimable en el aprendizaje del francés como lengua extranjera. Es una cualidad que permite a los alumnos superar las dificultades, frustraciones y momentos de desánimo que (por desgracia) son inevitables.
Los primeros pasos pueden parecer difíciles, incluso desconcertantes. Las palabras parecen extrañas, las reglas gramaticales escurridizas y los sonidos suenan diferentes en tus oídos. Si tu ánimo se resiente, no te asustes. Es mejor dejar pasar tranquilamente este pequeño momento de duda y volver más tarde con una nueva energía: la de la determinación combinada con la paciencia.
Aprender francés requiere tiempo, paciencia y un esfuerzo constante. Puede que tengas la sensación de que se está estancando, de que no avanzas tan rápido como te gustaría. Pero ahí es donde entra en juego la perseverancia. Si te mantienes centrado en tus objetivos, si te comprometes cada día a mejorar, acabarás viendo los frutos de tus esfuerzos.
Cada palabra que aprendas, cada frase que formes, te acercará un poco más al dominio de esta hermosa lengua. Con la perseverancia como fiel compañera, superarás retos, triunfarás sobre las dificultades y florecerás como estudiante de francés.
Compartir
Se necesitan dos partes para que sea posible compartir. A fuerza hay que compartir con otra persona. Y durante las clases de francés, la noción de compartir entre alumnos y profesores es de suma importancia. Es un vínculo profundo que se forja entre los que enseñan y los que aprenden, un intercambio precioso en el que cada uno aporta su contribución.
Los profesores, animados por una pasión contagiosa por la lengua francesa, comparten generosamente su experiencia y sus conocimientos lingüísticos. Sus ánimos, consejos y valiosas explicaciones están ahí para guiar a los alumnos en su camino hacia el dominio del francés. Se entregan en cada clase porque creen en cada alumno y en su potencial.
Por su parte, los alumnos aportan su curiosidad, su energía y sus ganas de aprender. Comparten sus experiencias, dudas y éxitos, creando una dinámica colectiva de aprendizaje.
Más allá de los conocimientos lingüísticos, el compartir entre alumnos y profesores alimenta las emociones. Los momentos de risa, complicidad y asombro ante los descubrimientos lingüísticos estrechan lazos y crean recuerdos duraderos. Emerge una profunda dimensión humana, ya que compartir permite conectar a un nivel más personal. Los profesores se convierten en guías afectuosos, en mentores que acompañan a los alumnos en su viaje. Los alumnos, a su vez, encuentran consuelo, inspiración y una motivación renovada a través de las relaciones que establecen con sus profesores.